El Casale fue donado a la familia Carocci en 1648 por el emperador Fernando III, que otorgó a los hermanos Sigismondo y Caterino el título de nobles del Sacro Imperio Romano por haber salvado la vista de la emperatriz Eleonora de Austria gracias a su habilidad como cirujanos. Situado a 700 m sobre el nivel del mar, el Casale domina el valle de Castoriana. El paisaje incontaminado, el panorama inolvidable lo convierten en el lugar ideal para pasar unas vacaciones de paz y colores, que le permiten redescubrir la armonía de la naturaleza.
El Casale ofrece a sus huéspedes un área de juegos equipada para dejar a sus hijos libres para divertirse sin limitaciones.
Para sus almuerzos con amigos hay una gran área común con una cómoda barbacoa para asar al aire libre.